domingo, 9 de octubre de 2011

Hasta pronto, amigo mío...

Hasta pronto, amigo mío, hasta pronto, 
querido mío, te llevo en el corazón. 
La separación predestinada 
promete un nuevo encuentro.
Hasta pronto, amigo mío, sin gestos ni palabras, 
no te entristezcas ni frunzas el ceño. 
En esta vida el morir no es nuevo 
y el vivir, por supuesto, no lo es.

Serguéi Yesenin